viernes, 17 de junio de 2011

she's a good girl

"Sometimes I get the itch to go out for a drink thinking I might miss meeting the woman of my dreams, but then I realize the woman of my dreams isn't at a bar at 12:36 on a Wednesday morning. No, the woman of my dreams is asleep in bed with her lame boyfriend she's only now beginning to see is lame. Nice enough guy, but no passion or curiosity. It was cute when he called her babe at first but now it's just lazy and distant sounding. The woman of my dreams just twitched in her sleep because I mentioned her. The woman of my dreams is not usually twitchy. The woman of my dreams likes Family Guy but doesn't LOVE Family Guy. The woman of my dreams will engage in conversations that don't necessarily cater to her in exchange for my moving quickly through the shop talk. The woman of my dreams has to be up at 7am. Maybe the woman of my dreams is at the gym, not the bar. I better get to bed."



martes, 7 de junio de 2011

Recorriendo los Mapas de Vetusta

Éramos muchos los que esperábamos este momento, pero los vetustos se hacían de rogar. Haciendo honor a Morla, la vieja tortuga que tantas glorias les ha dado, han andado lentos por el mundo hasta traernos de vuelta sus Mapas. Como si de buenos mochileros se tratase, han llevado a sus espaldas, durante casi tres años, la responsabilidad de hacer un disco tan brillante y aclamado como el anterior. Pero ese momento ha llegado. Después de un día duro de estudio, cerveza en mano, ordenador encendido y unos cascos Panasonic verdes que esperaban este momento casi más que yo.

Suena Los días raros, lenta pero con unos efectos musicales alucinantes que la hacen digna merecedora de ser la canción inaugural. La cosa se anima con Lo que te hace grande, un más que posible single que suena algo más rock, pero vuelve a unas aguas más tranquilas con el buen rollo que trasmite En el río. Buen rollo que queda patente también en El hombre del saco, una de las grandes del disco ("puestos a pedir..."). No podía faltar un espacio para algo más animado y, en definitiva, más comercial: llegan Boca en la tierra y cenas ajenas. Y, entrelazadas con las demás, nos encontramos con los pilares de este disco: Baldosas amarillas y Maldita dulzura. La primera, con una letra muy al estilo Vetusta, es de esas canciones que podría escuchar una y otra vez sin llegar a cansarme. La segunda, simplemente, sublime...De lo mejor que he escuchado en mucho tiempo.

Las comparaciones siemrpe son odiosas, así que no entraré a valorar si este disco es mejor o peor que su anterior Un día en el mundo. Sin duda es un disco mucho más tranquilo y, por lo tanto, algo menos comercial. Los que busquen en él númerosunodelos40 no creo que vayan a tener mucha suerte. Pero lo cierto es que el disco engancha. A pesar de que la voz de Pucho, el cantante de la banda, sigue sin convencer a muchos, la complejidad de las letras y la capacidad -no al alcance de todos- de no caer en tópicos amorosos para rellenar una canción hacen de este un grupo que ya está entre los más grandes. Ya lo decían ellos..."!Sálvese quien pueda!" Pues salvados quedan.